De Vervreemdeling, gedichten

por Rómulo Meléndez.

Buenas noticias! Acaba de aparecer el libro de poesía en Holandés, titulado De Vervreemdeling del rapsoda de origen chileno: Vladimir Cárdenas. 

Amante de Panero y Vallejo, vive aislado en un barrio de alcurnia, en Ámsterdam.

Se ríe de la vida con razón y sin razón. Le cuesta contener sus nervios y es amante de la buena onda, de hacer bromas sin discreción.

Vladimir Cárdenas, no tiene dificultad de contar su vida, de contar sus secretos, qué busca en internet todas las noches...No es un enajenado, es un intelectual subterráneo que no acude a eventos culturales de la superficie de Ámsterdam.

Acaba de publicar su primer libro titulado de Vervreemdeling. Neologismo de vreemdeling que en Castellano sería extranjero sinónimo de raro.

Sobre la poesía nos dice Vladimir: la poesía es la expresión de todo, todo puede ser poesía. Si yo digo ‘caca’ puede ser poesía y si digo tres veces ‘caca’ podría ser gran poesía.

El libro, el contenido del libro no está dedicado a nadie y no lo escribió en Castellano, porque él vive en Holanda y al estar aquí tiene que hablar y escribir en Holandés.

Del libro no se sabe a ciencia cierta dónde se vende y tampoco si tiene un precio. Un hecho es que tenemos un libro en nuestras manos. En la portada aparece un autoretrato del rapsoda, con labios rojos y una pose a la César Vallejo, con un anillo en el anular derecho, pensativo pero atento a los movimientos urbanos.

Vladimir escribe en estado etílico, pero dosificado, pues el alcohol no es rítmico. Te hace babear. Otras substancias también son bienvenidas, sobretodo si son prohibidas por el estado. LIBRORUM NOVO. CíRCULO D.M.

Bonus track, un fragmento del libro De Vervreemdeling (pag. 21)

Geloof niet

Geloof niet in de Wetten

Geloof niet in het aanschijn Gods

Geloof niet in je Heilige Moedertje

Geloof niet in de Boeddha

Geloof niet in je fantastische vriendin

Geloof niet in je therapeut

Geloof niet in je geile aanbidder

Geloof niet in je kinderen

Geloof niet in de toekomst

Geloof niet in je betrouwbare man

Geloof helemaal niet in Allah

en nog minder in de Nederlandse rechtstaat

Geloof niet in je eigen persoontje

en ook niet in een ideaal

Geloof niet in het Goede

Geloof niet in het Schone

Geloof niet in de Kunst

Geloof geen enkel boek en geen enkel gedicht