20081218

EL PAPEL DE LA MIGRACION EN EL DESARROLLO (II)

...nos escriben desde Chile
ESTIMADO RóMULO MELéNDEZ Y AMIGOS DE RELEVO SOLIDARIO GRACIAS POR ESTE CONTACTO. SOY UNA PERSONA QUE VIVE ACTUALMENTE LA EXPERIENCIA MIGRATORIA Y DESDE HACE VARIOS AÑOS, ENTRE OTRAS COSAS PUBLICO ALGUNOS COMENTARIOS EN OCASIóN DEL "DíA INTERNACIONAL DEL MIGRANTE". SE TRATA DE UN TRABAJO ABSOLUTAMENTE VOLUNTARIO Y SE REALIZA DESDE CHILE, DONDE RESIDO ACTUALMENTE. ESTE AÑO POR RAZONES DE TIEMPO NO PUDE HACER UN ARTíCULO, POR CUANTO ME GUSTARíA COMPARTIR CON USTEDES LOS QUE HICE EN LOS DOS úLTIMOS AÑOS ESPERANDO QUE PUEDA SER SOCIALIZADO ENTRE SUS REDES. RECIBAN UN SALUDO MUY CORDIAL LILIA NUÑEZ ASOCIACIóN DE INMIGRANTES POR LA INTEGRACIóN LATINOAMERICANA Y DEL CARIBE.


Lilia Núñez Cortijo1

La realidad no existe, ella es “construida” con palabras e imágenes de aquello que queremos aprehender. Las palabras construyen a su vez discursos y las imágenes pueden reflejarmitosque se reproducen en nuestra mente adoptando la forma de conocimiento.

Cuando oímos el discurso que circula sobre la migración contemporánea, la imagen que se nos viene a la mente es de muchas personas procedentes de países ‘pobres’-principalmente del sur y del este- dirigiéndose a los países ‘ricos’ del norte. Las personas que por las mismas razones se trasladan desde algún país desarrollado a otro que lo es menos parecen no entrar en ésta categoría. Los análisis del tema hacen hincapié en la pobreza como causa principal de la migración, admitiéndose también los problemas de violencia, como detonadores del desplazamiento y exilio. Por su parte, los discursos oficiales (gobiernos y otros poderes) han tratado de ubicar a la migración como una“amenaza emergente” a la seguridad hemisférica, para justificar el carácter selectivo-excluyente que tienen las actuales políticas migratorias.

Pero, pobreza y violencia no explican por sí mismos que casi 200 millones de personas entodo el mundo se hayan ido de sus países, las más de las veces en forma involuntaria. Intentemos una explicación a la migración de carácter laboral que es la de mayor volumen. Se ha dicho con razón que dentro de la lógica que rige el mercado transnacional de trabajo, hay una oferta de trabajadores migrantes por que hay una demanda detrabajadores extranjeros que viene precisamente desde los países industrializados. En efecto, se trata de un requerimiento sostenido que lleva ya medio siglo y permanecerá por medio siglo más (según la División de Población de las Naciones Unidas). Pero, ¿a qué responde esa demanda?

Hay por cierto más de una explicación, pero la siguiente suele estar a menudo ausente enlos análisis de la movilidad humana. La necesidad de trabajadores extranjeros que tienenlos países industrializados está directamente asociada a la denominada transición demográfica,fenómeno que se inicia en el siglo XIX y se hizo más visible después de la IIGuerra Mundial, alcanzando en el año 19982 su punto histórico de inflexión. Dicho enotras palabras, la población mundial ha empezado a envejecer por que la esperanza de vida es cada vez mayor, mientras hay cada vez menos nacimientos en el mundo. Esta tendencia empieza primero en las regiones más desarrolladas3y el impacto seríacatastrófico para algunos de éstos países desde el punto de vista productivo y social, de noestar siendo compensada con trabajadores extranjeros. Existe entonces desde hace variasdécadas una transferencia sostenida de población económicamente activa procedente deregiones menos desarrolladas, con tasas de fertilidad entre 1,46% a 2,4% anual, hacia las regiones más ricas con tasas de fertilidad por debajo del reemplazo (0,25%).


Un ejemplo cercano es España, que presenta una de las tasas más bajas de fecundidad.Según un reciente estudio del OCDE, en la última década, España casi ha sextuplicadola oferta laboral para extranjeros, con lo que ha logrado recuperar no solo el sistema deSeguro Social, sino dinamizar el empleo local debido al aumento de transaccionescomerciales, mayor capital creado y acumulado, más empresas pequeñas y medianas,más ofertas de trabajo, etc., impulsando su PIB por encima de muchos países europeos.Mientras en la Unión Europea la tasa de desempleo se sitúa muy cerca del 10%, en Madrid (actualmente la región más rica de España) se encuentre por la mitad de esta cifra y ostenta además un 30% más de ingreso per cápita que la media de la Unión Europea, como consecuencia, fundamentalmente, del trabajo de los inmigrantes que representan el 15% de la población, según lo han admitido sus propias autoridades.

La migración sur-sur
En el marco de un nuevo proceso de 'globalización' y de libre movilidad de factoreseconómicos y productivos, en la última década del siglo XX, la migración se diversifica ylos países emisores netos de población emigrante con mayor grado de desarrollo relativo,para poder compensar la pérdida de su fuerza laboral nacional, empiezan a demandartrabajadores extranjeros dentro de la misma región, lo que determina una ruta migratoriasur-sur, eslabonada a la ruta sur-norte. No es casual entonces que en la regiónsudamericana: Uruguay, Argentina y Chile, países con tempranos descensos de sus tasasde natalidad, cumplan actualmente el doble papel de emisor-receptor de trabajadoresmigrantes. Cabe indicar que a nivel global, aproximadamente una tercera parte de los 191 millones de migrantes que hay en todo el mundo se ha trasladado de un país en desarrollo a otro, mientras que otro tercio ha pasado de un país en desarrollo a uno desarrollado. Es decir, que los migrantes “Sur a Sur” son hoy día casi tan numerosos como los “Sur aNorte”.4


Los mitos de la migración
La idea muy difundida que la migración contemporánea es un fenómeno “masivo” e“inédito” en la historia no deja de ser solo un mito. Entre 1870 y 1930, en el contexto de una de los peores trances de su historia (crisis del agro, cesantía, guerras, hambruna,epidemias), Europa expatrió unos 50 millones de personas que se dirigieron principalmente a distintos países de América, entre ellos EE.UU. y los paísessudamericanos de la costa atlántica. Esa cifra representaba al menos un 12,5% de lapoblación europea de la época. Aunque muchos inmigrantes europeos retornaron, quienesse quedaron se volvieron propietarios y sus economías prosperaron gracias a esfuerzopropio, pero también a las generosas políticas inmigracionistas y colonizadoras fomentadas por los gobiernos de la época.


Hoy los migrantes – que proceden fundamentalmente de las ex colonias del sur -representan sólo el 3% de la población mundial y se encuentran en las distintas regionesdel mundo. Se trata fundamentalmente de gente en edad productiva, hombres y mujeresque en su mayoría cuentan con altos niveles de calificación y que muchas veces debentranscurrir buena parte de su vida útil en condición de “irregular”, debido a políticas restrictivas que insisten en ver en el trabajador extranjero sólo como una carga para la sociedad receptora.

Nada más lejos de la verdad. Según datos del BID, sólo los latinoamericanos y caribeñosen Estados Unidos producían hace dos años una renta de 450 mil millones de dólares anuales, cifra que representaba el tercer PIB de las Américas después de México y Brasil con excepción de EE.UU. y Canadá. Actualmente, las remesas del trabajo migratorioascienden a unos 232 mil millones de dólares, de los cuales 167 mil millones tienen como destino los países en desarrollo, superando el volumen conjunto de ayuda que estosreciben de todos los países donantes, empinándose incluso por sobre la inversiónextranjera directa. Es decir, el trabajo de hombres y mujeres migrantes no sólo aporta aldesarrollo del país de residencia sino que además está ayudando a sostener la economíadel país de origen.

Cabría sin embargo preguntarse ¿cuáles son los costos humanos y sociales de esta dobleresponsabilidad?, ¿por qué estos aspectos no son considerados para la elaboración depolíticas públicas eficientes que empiecen con resolver el problema de la indocumentaciónmigratoria, que es la fuente de la trasgresión y vulnerabilidad de los derechos humanos delos migrantes?. ¿Cómo explicar la paradoja de que muchos países considerados pobresque en los 90’ se han convertido en “exportadores” compulsivos de trabajadores migrantes-como es el caso de los países de la región andina- estén a la vez transfiriendo a otros países más desarrollados, principalmente del norte, cuantiosas ganancias y riquezas naturales no renovables, a un ritmo que compromete el patrimonio de generacionesfuturas y la sustentabilidad de su propio desarrollo?.5


En efecto, en la región latinoamericana, el modelo extractivo-exportador (que emplea elmismo sistema del siglo XIX) constituye una sangría de riqueza que daña el medioambiente y la biodiversidad, eliminando fuentes naturales y tradicionales de empleo decentenares de comunidades. Observadores internacionales han identificado que éstemodelo de privatización de tierras y recursos naturales, escoltado de una política demilitarización de zonas de riqueza estratégica, constituye la principal causa deldesplazamiento compulsivo de centenares de comunidades indígenas rurales y urbanas.En tal contexto, el binomio pobreza/violencia, tiene entonces su propia explicación y lo que si revelan es el carácter forzado que tiene la migración contemporánea y la irracionalidad de un modelo económico que es vendido como “exitoso”.

Por cierto que la migración también puede tener aspectos negativos, aunque,irónicamente, como ha dicho Kofi Annan6, algunos de sus peores efectos proceden de lasmedidas destinadas a controlarla, llevando la peor parte los migrantes indocumentados,quienes están expuestos a toda clase de abusos y vulneración de sus derechos y libertades.

La migración ha sido históricamente un factor de desarrollo no sólo económico, sinotambién social, cultural y político. El sentido común indica que si los migrantes de ayer yde hoy fueron y son capaces de enriquecer patrimonios propios y ajenos, lo menos quedeben esperar es ser tratados en igualdad de condiciones y oportunidades. Más allá de laconstrucción de modelos teóricos explicativos, hay suficientes razones éticas, humanas para demandar urgentes políticas públicas que reconozcan el papel subsidiario quecumple la migración transnacional en el desarrollo de los países de origen y destino.

Resulta claro que en materia migratoria, la sola acción del mercado no es suficiente. Lagestión migratoria requiere de políticas públicas intersectoriales y transversales y sobretodo coherentes con la dinámica de 'libre' movilidad de factores (capitales, bienes, ideas).La migración no puede seguir siendo materia de gestiones unilaterales, se requiere poneren marcha convenios y acuerdos entre países emisores y receptores de migrantes, queincorporen la perspectiva social, cultural y de género, superando las visiones reduccionistas o meramente economicistas de la migración. Es probable que lasustentabilidad del desarrollo de áreas, países y regiones en el siguiente medio siglodependa en buena medida de ésta decisión.



Santiago, noviembre del 2006



1Investigadora de asuntos migratorios e interculturales (lnunezcortijo@yahoo.es)
2Segunda Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento. Madrid, 8 a 12 de abril de 2002. Ya en1956, laDivisión de Población del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de las NNUU, publicó un primerinforme sobre el envejecimiento de la población, centrado en los países desarrollados.
3Un estudio realizado por la División de Población de las Naciones Unidas (2000) sobre la “Migración de reemplazo” confirma que los países más prósperos del mundo, particularmente el Japón y los países deEuropa, tienen tasas de fecundidad inferiores a las de reemplazo. Si hay menos jóvenes en el mercado laboral,hay menos aportantes activos al fondo de jubilaciones, el que se va estrechando en la medida en que lapoblación envejece, lo que determina una demanda estructural de trabajadores extranjeros que difícilmentepueden proveer los países de la órbita norte.
4Migración Internacional y Desarrollo. Informe del Secretario General de las Naciones Unidas, mayo 2006,pp.13.
5Mientras las remesas de los trabajadores peruanos emigrados se han incrementado en el reciente lustro en un100%, las remesas del capital extranjero invertido en el Perú se incrementaron en casi un 600% en el mismoperíodo (Humberto Campodónico. Revista Actualidad Económica, Lima, diciembre 2005).
6Kofi A. Annan. “Mientras haya países seguirá habiendo migrantes”. Artículo publicado en el Diario La Nación. Santiago, Chile, 9 de junio del 2006.