20100422

ETERNIDAD COTIDIANA



Todas las mañanas al salir de casa
paso por la puerta del camposanto
a su izquierda está el tanatorio
donde con gran frecuencia velan
mis conciudadanos, mejor dicho velamos
a nuestros amados familiares, que ya descansan
en la fría estancia que rodeo cada mañana.

Es tan familiar el trágico cotidiano escenario
reducido a esas horas intempestivas
a una luz, una puerta abierta
y una imaginda escena de dolor y pena,
con sarcasmo le digo a la parca
otro cliente, uf, como eres no descansas
ni en festivo, ni en cuaresma te tomas libranza
pa' que tanta agonía si te sobra pitanza.

Mi egoísmo me hace entender que llenan los nichos
me digo que pasan los días y no he comprado el mío
ese que tengo enmarcado junto a mi padre y mis ancestros
pequeño, fresquito junto a los árboles
cuyas copas me recuerda mi punto de destino.

Y sí caminando en itinerario al trabajo
voy rodeando el camposanto con energías renovadas
mirando, mirando las copas de verdes árboles
preguntándome cuándo voy a comprar mi lugarcito
ese que se me olvida al darle la espalda
desde ese momento como todo mortal, me siento eterno.

Francisco Jesús Muñoz Soler


SIN VéRTEBRAS. CíRCULO D. M.